miércoles, 9 de marzo de 2011

Experimento: tinta invisible

Fuente: “Ilustrated Science Experiments for Children”. Robert Brown. Tab Books Inc. — Blue Ridge Summit. 1987.

SE NECESITA: Una gota de aceite de cocina, una cucharada de amoniaco doméstico concentrado, agua, pincel pequeño, papel de escribir, una botella pequeña.
HACER ESTO: Poner el aceite y el amoniaco en la botella. Añadir cuatro cucharadas de agua y agitar bien. Usar el pincel para escribir con esta solución sobre el papel. Cuando se seque el papel la escritura desaparecerá, pero aparecerá de nuevo si se sumerge el papel en agua. Podrá hacerse aparecer y desaparecer muchas veces. En cada caso, el líquido deberá agitarse antes de ser usado.
POR QUÉ: El aceite y el agua no se mezclan, pero el amoniaco facilita la disolución del aceite, de forma que cuando la mezcla se agita, sus componentes quedan casi perfectamente mezclados. Al pintar sobre un papel, el aceite es absorbido, mientras que el agua y el amoniaco se evaporan. Cuando se sumerge en agua el papel, absorbe menos agua en las zonas donde hay aceite, y el contraste permite ver la escritura.

Experimento: libros en equilibrio

Fuente: “Ilustrated Science Experiments for Children”. Robert Brown. Tab Books Inc. — Blue Ridge Summit. 1987.

SE NECESITA: Diez libros del mismo tamaño, una mesa firme.
HACER ESTO: Apilar los libros. Después desplazar el de arriba hasta que casi se caiga. Hacer lo mismo con el siguiente. Se observará que éste puede sobresalir hasta un cuarto de su longitud sobre el tercero, antes de caer junto con el primero. Continuar con toda la pila y al llegar al último advertir que el primero sobresale completamente de la mesa.
POR QUÉ: El primer libro puede desplazarse casi hasta la mitad sobre el segundo, por que su centro de gravedad está en medio. Al mover el segundo libro, debe considerarse el centro de gravedad de los dos libros juntos. Por tanto, sólo puede desplazarse un cuarto de su longitud sobre el tercero. Con el tercero habrá que determinar el centro de gravedad de los tres libros para saber cuánto puede sobresalir Todos los libros pueden moverse un poco, pero cada vez menos, ya que deberá considerarse el centro de gravedad del libro que se mueve más todos lo que tiene encima.

Experimento: rompecabezas chino

Fuente: “Ilustrated Science Experiments for Children”. Robert Brown. Tab Books Inc. — Blue Ridge Summit. 1987.

SE NECESITA: Cuatro o seis trozos cuadradas de 4 o 5 cm. de lado de madera terciada o cartón grueso, cinta de sarga pegamento o grapadora.
HACER ESTO: Pegar o grapar las piezas con la cinta como en el dibujo, dejando 1,2 cm. de separación entre ellas, aguantar por un extremo, volver al revés, y parecerá que cae una pieza sobre otra hasta el final.
POR QUÉ: Las piezas están unidas entre sí de forma que van cayendo una a continuación de otra. Es una demostración simple de la reacción en cadena, y resulta divertido.

Experimento: la moneda sobre el canto

Fuente: “Ilustrated Science Experiments for Children”. Robert Brown. Tab Books Inc. — Blue Ridge Summit. 1987.

SE NECESITA: Una moneda grande.
HACER ESTO: Intentar que la moneda se sostenga sobre el canto. Es difícil. Hacerla girar y se aguantará hasta detenerse. Para ello, aguantarla con una mano y, con el índice de la otra, dar un golpe rápido sobre el canto.
POR QUÉ: La moneda, al girar, se convierte en un pequeño giróscopo que se resiste a cualquier cambio en su plano de rotación. Este es uno de los giróscopos más simples, los cuales fueron inventados en 1852 por un ilustre físico francés, Lean Foucault. Una bicicleta se mantiene vertical en parte por sus ruedas que giran como giróscopos. Los girocompases, más complicados, sirven para orientar barcos y aviones.

Experimento: el truco de la inercia

Fuente: “Ilustrated Science Experiments for Children”. Robert Brown. Tab Books Inc. — Blue Ridge Summit. 1987.

SE NECESITA: Una mesa lisa, papel liso de envolver, un vaso u otro recipiente de fondo liso con agua caliente.
HACER ESTO: Secar bien el exterior del vaso y colocar sobre un papel como se muestra. Mientras se aguanta con una mano el papel, dar golpes rápidos con la otra, y se deslizará bajo el vaso sin que el agua se derrame.
POR QUÉ: Si se tira del papel lentamente, se atrae también el vaso a causa del rozamiento entre el papel y el vidrio. Pero al tirar rápidamente, la inercia del vidrio y el agua es lo bastante grande como para anular la fuerza de rozamiento. Usar agua caliente porque el agua fría puede provocar la condensación en el exterior del vaso, mojándolo e incrementando el rozamiento, con lo que se atraería el vaso.

Experimento: esconder el dinero

Fuente: “Ilustrated Science Experiments for Children”. Robert Brown. Tab Books Inc. — Blue Ridge Summit. 1987.

SE NECESITA: Siete monedas, un vaso de agua, un plato.
HACER ESTO: Disponer las monedas como se muestra, colocar el vaso de agua encima, y el plato sobre el vaso. Al mirar hacia abajo, como en el dibujo, parecerá que las monedas han desaparecido, excepto los bordes, que sobresaldrán por el borde del vaso.
POR QUÉ: La causa es la refracción, que es la desviación de los rayos de luz al pasar con un determinado ángulo de un medio a otro, en este caso, aire, vidrio y agua. La Luz proveniente de las monedas es desviada hacia el plato, de forma que nunca llega al ojo.

Experimento: el girodisco

Fuente: “Ilustrated Science Experiments for Children”. Robert Brown. Tab Books Inc. — Blue Ridge Summit. 1987.

SE NECESITA: Un disco long-play antiguo de gramófono, cordel, cerillas.
HACER ESTO: Pasar el cordel por el orificio del disco. Atar una cerilla a un extremo, para fijar el disco mientras se sostiene la cuerda por el otro extremo. Pedir a alguien que haga oscilar de un lado a otro el disco, como un péndulo, sin permitir que tiemble. Será imposible. Ahora hacer girar el disco mientras oscila, se mantendrá en equilibrio o en el mismo plano.
POR QUÉ: Esto es un giróscopo, el aparato con el que se orientan aviones y cohetes. La peonza es otro giróscopo. El principio es: todo cuerpo que gira tiende a mantenerse en el mismo plano a menos que una fuerza exterior lo mueva.

Experimento: romper cerillas de madera

Fuente: “Ilustrated Science Experiments for Children”. Robert Brown. Tab Books Inc. — Blue Ridge Summit. 1987.

SE NECESITA: Cerillas de madera.
HACER ESTO: Coger las cerillas entre los dedos como se muestra e intentar romperlas con la fuerza de éstos. Es difícil o imposible. Apoyar el dedo medio sobre una mesa y el palo se romperá al presionar con los dedos contiguos o al dar un golpe sobre la mesa.
POR QUÉ: Los músculos de la mano tienen muy poca fuerza para mover los dedos hacia atrás. El tablero de la mesa aporta la fuerza necesaria para aguantar al dedo medio mientras los otros rompen la cerilla. Por precaución, encender y apagar todas las cerillas antes de realizar el truco. Así el fósforo no podrá prenderse y quemar un dedo.

Experimento: la bola que salta

Fuente: “Ilustrated Science Experiments for Children”. Robert Brown. Tab Books Inc. — Blue Ridge Summit. 1987.

SE NECESITA: Un listón de 5 por 10 cm. por 1 m de largo, dos cuencos pequeños, un bola o peso de hierro, cola o tacos.
HACER ESTO: Fijar los cuencos al extremo del listón, separados unos pocos centímetros. Colocar el peso en el cuenco más cercano al extremo, levantar el listón y dejarlo caer. Con un poco de práctica se logrará, durante la caída, transferir la bola al otro cuenco. (Apoyar en la pared el extremo inferior del listón para que no resbale).
POR QUÉ: Un cuerpo que cae libremente aumenta su velocidad 9,81 metros cada segundo, por la atracción constante de la gravedad. Pero el listón no está libre. El extremo en contacto con el suelo no cae. El punto que se halla a tres cuartos de la distancia al otro extremo, cae como sí estuviera libre. El extremo superior cae más aprisa; no sólo es atraído por la gravedad, Sino también por todo el listón. La bola, al estar libre, no puede caer más aprisa de 9,81 metros por segundo. El cuenco, al bajar más rápido que ésta, escapa de la bola, describiendo un arco. Así el segundo cuenco queda por debajo de la bola que cae en línea recta.

Experimento: tira bimetálica

Fuente: “Ilustrated Science Experiments for Children”. Robert Brown. Tab Books Inc. — Blue Ridge Summit. 1987.

SE NECESITA: Una lata metálica, alambre de cobre de calibre 14, soldador, madera.
HACER ESTO: Cortar dos tiras del metal de la lata, soldar una con otra por los extremos. Deben medir algo más de 60 cm. Enrollar la tira alrededor de un pequeño cilindro de madera y fijar firmemente con tornillos. Soldar el alambre, desnudo y limpio, por el medio de la tira. Sacar la tira de la madera fijar un extremo a un soporte, dejando el otro libre, como se muestra en el dibujo. Esto es un termómetro rudimentario.
POR QUÉ: Con los cambios de temperatura el cobre se dilata y se contrae más que el hierro de la lata. En esto se basan muchos termostatos y algunos termómetros.

Experimento: luz bajo el agua

Fuente: “Ilustrated Science Experiments for Children”. Robert Brown. Tab Books Inc. — Blue Ridge Summit. 1987.

SE NECESITA: Hilo magnético esmaltado, clavos de pesca, tubo de cartón de un rollo de papel higiénico, bombilla de una linterna de pila simple, frasco de agua, transformador de tren eléctrico.
HACER ESTO: Cortar una sección del tubo de la longitud de los clavos, rellenar con estos y envolver con unas 200 vueltas de cable, asegurándolo con cinta adhesiva. Enrollar con 50 vueltas un trozo más pequeño de tubo y soldar los extremos de esta bobina a la bombilla. Conectar la bobina mayor al transformador. Introducir bobina de la bombilla en el frasco con agua. Colocar sobre la bobina grande y la luz se encenderá bajo el agua.
POR QUÉ: El agua puede conducir altos voltajes y producir un cortocircuito, pero esto no ocurrirá con el voltaje bajo del transformador. Las dos bobinas aquí constituyen un transformador. Están conectadas por un campo magnético que se crea a través del agua y del vidrio del frasco.
NOTA: El Dr. Elihu Thomson, un científico americano, realizó su lámpara de bobina y bombilla con un peso tal que apenas se hundiesen en el agua. La repulsión eléctrica las hacía subir cuando se conectaba la corriente. Esto es difícil pero constituye un excelente experimento científico.

Experimento: higrómetro de cabello

Fuente: “Ilustrated Science Experiments for Children”. Robert Brown. Tab Books Inc. — Blue Ridge Summit. 1987.

SE NECESITA: Un soporte de madera, alfiler, lápiz, pegamento, cartulina, unos cuantos cabellos humanos.
HACER ESTO: Instalar el aparato como se indica, de forma que la aguja de cartulina, esté sostenida por arriba mediante los cabellos (dos o tres son suficientes). El pelo se estira cuando aumenta la humedad en el ambiente, haciendo que la aguja baje. Este higrómetro mide la humedad relativa aproximada. El higrómetro de depósito seco y húmedo es más preciso y es el que usan los observatorios meteorológicos.

Experimento: carretilla aérea

Fuente: “Ilustrated Science Experiments for Children”. Robert Brown. Tab Books Inc. — Blue Ridge Summit. 1987.

SE NECESITA: Un cable fuerte, dos poleas, madera, tuercas.
HACER ESTO: Las dimensiones no son demasiado importantes, pero en el dibujo se da un ejemplo. Construir como se muestra. Atar el cable entre dos árboles y se tendrá una bonita carretilla para los niños. Cuanto mayor sea la inclinación del cable, más deprisa correrá. Para impedir que la persona choque contra el árbol del extremo inferior, proteger con una almohada o hacer que la inclinación no sea demasiado grande para que la propia carretilla se detenga al llegar al final.

Experimento: la tercera ley de Newton

Fuente: “Ilustrated Science Experiments for Children”. Robert Brown. Tab Books Inc. — Blue Ridge Summit. 1987.

SE NECESITA: Dos tablas lisas de madera de balsa, bloques más pequeños, puntas largas, tela para una vela, bobina de hilo, tornillos, un globo grande.
HACER ESTO: Fijar con tornillos la bobina a un bloque vertical. Tallar un agujero de ½ cm. de diámetro para que circule el aire, (El bloque está fijo a otro que hace de base). Ajustar la vela en otro bloque que lleva las puntas. Colocar una tabla sobre la otra con varias puntas entre las dos, para que pueda rodar encima. Poner la vela y el globo sobre la tabla superior, de forma que el aire sople hacia la vela. No sucede nada. Levantar la vela, y la tabla rodará sobre las puntas en la dirección de las flechas. Apoyar de nuevo la vela, levantar el globo, y la tabla se deslizará en la otra dirección.
POR QUÉ: Cuando la vela y el globo están sobre la tabla, sus reacciones son iguales y opuestas. Al levantar la vela, la reacción del aire que escapa libremente del globo, mueve la tabla sobre la que se aguanta éste. Si se levanta el globo, como el aire sopla hacia la vela, empuja la tabla, al igual que el viento impulsa un barco al soplar contra sus velas,
COMENTARIO: La tercera ley de Newton establece que cada acción tiene una reacción igual y opuesta.

Experimento: una turbina sencilla

Fuente: “Ilustrated Science Experiments for Children”. Robert Brown. Tab Books Inc. — Blue Ridge Summit. 1987.

SE NECESITA: Una lata o cartón de leche, cordel, clavo, martillo, agua.
HACER ESTO: Agujerear el recipiente como se muestra, atar con el cordel y colgar. Poner agua dentro y empezará a girar con el agua saliendo a chorros.
POR QUÉ: Sir Isaac Newton descubrió que cada acción implica una reacción igual y opuesta. Al expulsarse el agua por los agujeros, presiona el recipiente en dirección opuesta y por eso le hace dar vueltas.

Experimento: destilador de emergencia

Fuente: “Ilustrated Science Experiments for Children”. Robert Brown. Tab Books Inc. — Blue Ridge Summit. 1987.

SE NECESITA: Plástico, recipiente, piedras, algo para cavar.
HACER ESTO: Cavar un hueco en el suelo y colocar dentro, a los lados, hojas u otros elementos vegetales. Poner en el centro el recipiente y cubrir con el plástico como se muestra en el dibujo. Bajo el sol, el agua destilada goteará dentro del recipiente.
POR QUÉ: La luz del sol atraviesa el plástico y es absorbida por la tierra y los vegetales. Este calentamiento provoca la evaporación del agua, que se acumula en gotas bajo el plástico. Luego resbala, hasta caer dentro del recipiente.
NOTA: Ray O, Jackson y C.H.N. van Bavel presentaron la idea de su destilador a la revista Science, sugiriendo que podría usarse para sobrevivir en un desierto sin agua.

Experimento: hacer un contrabajo

Fuente: “Ilustrated Science Experiments for Children”. Robert Brown. Tab Books Inc. — Blue Ridge Summit. 1987.

SE NECESITA: Una palangana antigua, un palo, cuerda fuerte, herramientas.
HACER ESTO: Formar una muesca en el extremo del palo para que se aguante en el borde de la palangana. Hacer un agujero en el centro de ésta y pasar la cuerda por él, haciéndole un nudo para que no se salga. Atar el otro extremo de la cuerda al palo, como se muestra. Apoyar un pie en el borde aguantando la palangana. Al pulsar la cuerda sonará una nota.
POR QUÉ: Cuando se pulsa la cuerda (una cuerda RE de contrabajo es ideal), vibra. Transfiere sus vibraciones a la palangana, que vibra también, y su sonido se hace claramente audible. Si se tensa la cuerda, vibra más deprisa y también la palangana. Con práctica, se producirán distintas notas.
NOTA: También puede usarse una lata de pintura de cinco kilos, y una cuerda fuerte de anclaje. Si se coloca un trozo de madera de 5 x 10 cm. bajo el borde de la palangana, en la zona donde se apoya el palo, se mejorará el sonido, ya que permitirá la salida de las vibraciones provenientes de la parte inferior de la palangana.

Experimento: la bicicleta

Fuente: “Ilustrated Science Experiments for Children”. Robert Brown. Tab Books Inc. — Blue Ridge Summit. 1987.

SE NECESITA: Una bicicleta, una cuerda, dos personas.
HACER ESTO: Atar la cuerda a un pedal y ponerlo abajo. Hacer que alguien aguante la bicicleta para que no se caiga. Tirar hacia atrás de la cuerda y la bicicleta se moverá hacia atrás.
POR QUÉ: Aunque la bicicleta se mueve hacia atrás, respecto al suelo, el pedal se moverá hacia delante, respecto a la bicicleta. El radio de la cadena y los diámetros de las ruedas se hallan en tal relación, que cuando el pedal se mueve un centímetro, la bicicleta se mueve varios. Por tanto, cuando se tira del pedal, bicicleta y pedal se mueven hacia atrás respecto al suelo, así como la mano. Cuando se tira de algo, la mano nunca se mueve en dirección contraria al tirón, a menos que el objeto del que se tira lleve un motor. El principio que explica esto puede demostrarse sobre un tablero o en el suelo. Tirar de un hilo enrollado en una bobina y ésta rodará hacia la mano, soltando hilo. Observar que aquí también la mano se mueve en la dirección del tirón.

Experimento: conservación de la energía

Fuente: “Ilustrated Science Experiments for Children”. Robert Brown. Tab Books Inc. — Blue Ridge Summit. 1987.

SE NECESITA: Una cuerda fuerte, una bobina de hilo, un peso ligero.
HACER ESTO: Pasar la cuerda por el agujero de la bobina y atar a un extremo el peso. Aguantar con una mano el otro extremo y con la otra la bobina, haciendo girar el peso en un amplio círculo por encima de la cabeza. Hacer esto al aire libre, lejos de cualquier cosa que pueda romperse. Tirar de la cuerda, acercando el peso a la bobina, y éste girará más deprisa.
POR QUÉ: Cuando el peso empieza a dar vueltas en un círculo amplio, se mueve a cierta velocidad. Al acortar el radio del círculo, tiende a moverse a la misma velocidad para no perder energía. Pero como la distancia que recorre de círculo en círculo es menor, el peso debe dar más vueltas por minuto para conservar la misma velocidad.

Experimento: cómo funcionan los cojines de bolas o rodamientos

Fuente: “Ilustrated Science Experiments for Children”. Robert Brown. Tab Books Inc. — Blue Ridge Summit. 1987.

SE NECESITA: Dos latas de pintura iguales, canicas.
HACER ESTO: Colocar las bolas alrededor del borde de una de las latas y poner la otra encima boca abajo, como se muestra, de forma que las canicas queden entre el hueco formado por ambas latas cerca de los bordes. La lata superior girará fácilmente sobre los cojinetes de bolas.
POR QUÉ: Los cojinetes de bolas reducen el rozamiento en los coches y en otras máquinas. El rozamiento producido por el rodamiento es mucho menor que el del deslizamiento, ya que las bolas son duras y tienen muy poco contacto con la superficie superior sobre la que ruedan.