Fuente: “Ilustrated Science Experiments for Children”. Robert Brown. Tab Books Inc. — Blue Ridge Summit. 1987.
SE NECESITA: Clavo, martillo, una pieza rígida de hierro, como un hacha (un yunque sería lo mejor).
HACER ESTO: Tocar con el clavo la mejilla y se notará frío. Colocarlo sobre la pieza de hierro, martillear hasta aplastarlo un poco, acercarlo a la mejilla y se sentirá que está caliente.
POR QUÉ: El martillo en movimiento tiene energía cinética (energía del movimiento). Cuando golpea el clavo, parte de esta energía se usa como trabajo para aplanar el clavo, parte se convierte en energía sonora que oímos, y parte en energía calorífica al producirse el aplanamiento. La energía calorífica aumenta la temperatura de la cabeza del martillo, de la pieza de hierro y del clavo. El incremento de temperatura es más apreciable en donde se hace la mayor parte del trabajo, en el aplastamiento del clavo.
SE NECESITA: Clavo, martillo, una pieza rígida de hierro, como un hacha (un yunque sería lo mejor).
HACER ESTO: Tocar con el clavo la mejilla y se notará frío. Colocarlo sobre la pieza de hierro, martillear hasta aplastarlo un poco, acercarlo a la mejilla y se sentirá que está caliente.
POR QUÉ: El martillo en movimiento tiene energía cinética (energía del movimiento). Cuando golpea el clavo, parte de esta energía se usa como trabajo para aplanar el clavo, parte se convierte en energía sonora que oímos, y parte en energía calorífica al producirse el aplanamiento. La energía calorífica aumenta la temperatura de la cabeza del martillo, de la pieza de hierro y del clavo. El incremento de temperatura es más apreciable en donde se hace la mayor parte del trabajo, en el aplastamiento del clavo.
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